martes, 16 de abril de 2013

#¡Detrás del Pentagrama!, #El Arte de arreglar y orquestar"



¡Detrás del pentagrama!

          "El Arte de arreglar y orquestar"

Por Omar Alfonso Reyes Canto

   El proceso de crear un arreglo musical para una composición musical es, definitivamente, un arte…Es como componer otra música que sirva de soporte a la primera…aunque es cierto que son muchas las veces en que el contenido compositorio del arreglo musical, supera con creces la primaria exposición de la canción original…

   Para comenzar a ejemplarizar cómo es el proceso de arreglar, pues comenzaremos desde el principio. Lo primero que hay que hacer antes de comenzar a llenar con notas musicales la partitura, en el sentido convencional de la escritura musical, o a programar los parámetros musicales en cualquier sistema computerizado de la música, en el sentido contemporáneo de la escritura musical, (y digo contemporáneo porque en estos sistemas no se puede prescindir de los valores acústicos de la música), pues, es escuchar la composición musical original tantas veces como nos sea posible…

   Hay que pensársela completa, tal si la composición musical original fuera nuestra… Mediante la audición repetitiva de la misma, hay que poco a poco adentrarse, entre otros aspectos, en el contenido emocional de su letra, (en el caso de que la misma haya sido creada para ser cantada), en su giro melódico, en su color armonico- tonal, ritmo,etc., en fin, en todo el acontecer sonoro que la composición proyecta…

   Una vez que todos estos aspectos de la canción hayan sido analizados detalladamente, entonces procederemos a observar las condiciones personales del cantante o la cantante que va a interpretar la canción… Por ejemplo, primeramente, hay que clasificar el registro de la voz, ya sea la misma soprano, contralto, tenor, barítono o bajo… 

   Después de que hayamos identificado el registro apropiado para la voz, y hayamos adaptado la tonalidad de la canción a la tesitura de la misma, (muchas veces tenemos que transportarla), pues nos enfocaremos en el color de la misma, o sea, en el timbre personal... He aquí un aspecto muy importante que hay que tener en cuenta al orquestar un arreglo musical... Hay que buscar el color orquestal que venga de acuerdo con el timbre vocal, el cual se logra mediante una instrumentación idóneamente escogida al efecto...

   Ahora bien, es bueno aclarar que una cosa es arreglar y otra orquestar… Arreglar es crear una segunda composición musical que por medio de sus  diseños armónicos y melódicos, sirva de introduccion, acompañamiento, intermedio y final a una canción original. Mientras que orquestar es instrumentar todos esos aspectos musicales cubiertos por el arreglo musical…o sea, escribir los instrumentos musicales que van a ejecutar el arreglo musical…Y por supuesto, para ello también hay leyes acústicas que se estudian en la asignatura de orquestación. Donde, entre otros aspectos netamente técnicos, la participación de los instrumentos musicales en la orquestación general, se mezclan de acuerdo a sus tesituras y grupos familiares...

   Y así, cuando ya hayamos concluído con todas las ideas del arreglo musical, el cual ha de estar basado en todos los parámetros musicales que anteriormente enunciáramos, daremos comienzo entonces a orquestar el mismo… Para lo cual, como anteriormente puntualizáramos, debemos seleccionar el color instrumental que generalmente resulte el más idóneo; tanto para la proyección de la voz como para el contenido emocional de la canción en si…Y, en esto,- y es necesario puntualizarlo-, debemos ser muy ingeniosos en cuanto a crear un timbre orquestal general que resalte el valor artístico de la canción original; o, en el otro sentido, que el mismo sirva, conjuntamente con el arreglo musical, para encubrir la falta de creatividad de la cual pueda adolecer la misma; como a veces sucede...(!)

   En referencia a lo planteado en el párrafo enterior, se puede decir de que hay una sentencia musical que dice más o menos así: “Un buen arreglo musical (includida la orquestacion del mismo, digo yo), hace buena a una mala canción; mientras que un mal arreglo musical hace mala a una buena canción…”

Omar


Notas.

Hoy día, gracias al avance de la tecnología en materia de los medios computerizados de la música, muchos son los músicos que sin preparación académica alguna, hacen sus trabajos apoyados en la eficacia de estas máquinas productoras de sonidos musicales convencionales y digitales…Pero, lamentablemente, en muchos casos los mismos, como evidentemente desconocen las leyes acústicas en las cuales están fundadas tanto las asignaturas como los instrumentos musicales, graban, por ejemplo, una trompeta, o un violín, o un oboe, etc., fuera de la tesitura original de los mismos... como también, entre otras cosas, armonizan sin observar las leyes armónicas que, de acuerdo a la acústica, rigen los enlaces, las cadencias y otros aspectos técnicos en la sucesión de los acordes…Por lo que, sin lugar a dudas, generalmente el sonido  alcanzado deja mucho que desear…(!)







  

  
   

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